O. Henry
Antología relatos cortos
Editorial Traspiés

ISBN – 978-84-942534-5-4

Año de esta edición 2015

Páginas 170

BREVE RESEÑA: Que el título no lleve a engaño a los aficionados a la música porque nada tiene que ver con los Rolling Stones. El libro es una antología de relatos cortos y ninguno de ellos se titula así. El título, más bien genérico, hace referencia al concepto de los relatos, pequeñas historias rodantes.

Los relatos retratan la época del autor, y él mismo tuvo su propia «biografía apasionante» al intentar hacer fortuna en Centroamérica con algunos negocios no del todo claros.

Una curiosidad: Esa expresión, que todavía se usa tanto hoy en día, de «República Bananera» la acuñó precisamente O. Henry; la mayoría no sabíamos nada de él hasta que Traspiés nos ha puesto al autor en las manos, pero sin saberlo, ya había dejado huella en nosotros.

Muchos de sus relatos transcurren en el joven Nueva York, donde se instaló después de una temporada en la cárcel, y algunos tienen cosas en común: su forma de narrar pasa por un narrador que tropieza accidentalmente con un conocido y conversan entre sí contándose historias suyas o de un tercero.

De la edición: pequeño formato, muy cómodo, de tacto agradable y muy buena impresión, con solapa y encuadernado fresado. Papel ahuesado de alta calidad. En conjunto, una pequeña maravilla.

SINOPSIS: Una divertida colección de relatos ambientados en el viejo Oeste y Latinoamérica, escrita con ironía y buen humor por uno de los genios del género breve.

BIOGRAFIA: William Sydney Porter, conocido literariamente como O. Henry, no fue solo uno de los maestros del relato norteamericano, sino también un profundo conocedor del alma humana. Esta colección de historias permite al lector acercarse a un estilista del lenguaje que usa los juegos de palabras, el doble sentido y la parodia, para mostrarnos las miserias y grandezas de sus personajes. La ambición del yanki vagabundo, la soledad del enfermo desahuciado, pero sobre todo el amor, ese amor que puede surgir incluso entre dos duros vaqueros del viejo Oeste, son los temas de estos Rolling Stones. Divertido e ingenioso, O. Henry comprende a sus trotamundos porque en el fondo él también lo fue antes de convertirse en una de las estrellas del periodismo neoyorkino.

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